El director mexicano Guillermo del Toro presentó este lunes en Ciudad de México su última película, "Titanes del Pacífico" (Pacific Rim), un proyecto al que dedicó tres años de su vida y que busca rescatar la relación que guarda desde niño con los monstruos.

El filme de animación, cuyo presupuesto ascendió a unos 185 millones de dólares, plantea un mundo apocalíptico en el que los seres humanos construyen gigantescos robots para luchar contra terribles criaturas que emergen del mar.

"¡Soy un loco fetichista de los monstruos!", exclamó en conferencia de prensa un sonriente Del Toro, quien se inspiró de películas japonesas que marcaron su niñez, como "La guerra de las gargantúas" o "Godzilla".

Según el autor, la dificultad más grande que encontró al realizar esta película fue la de "no perder la mirada de un niño de 12 años (...) la de aquel Guillermito que dibujaba" monstruos en su natal Guadalajara (oeste).

Orgulloso de su última creación, el cineasta comentó entre carcajadas: "¡Le dediqué tres años de mi vida! (...) no fue un noviazgo, sino un matrimonio... ¡y no te casas si no estás profundamente enamorado!".

La película, protagonizada por el británico Idris Elba, la japonesa Rinko Kikuchi y el estadounidense Charlie Day, gira en torno al imaginario Proyecto Jaeger, que consiste en dos pilotos que conectan sus mentes y memorias para controlar máquinas de guerra.

"Titanes del Pacífico" busca mostrar que "nos necesitamos los unos a los otros" para salvar al mundo, y que más que armas "se necesita ingenio", comentó Del Toro, quien adelantó que los políticos aparecen como "una punta de pendejos (idiotas)" en su filme.

"Guillermo es muy talentoso, no hace películas para dormir con supermodelos o tener autos costosos", comentó en la conferencia Charlie Day, quien consideró "un privilegio" trabajar con el director mexicano.

"Soy un gordo terco que filma las películas que quiere filmar. Me he complicado la vida desde chico (...) Yo soy lo que hago", replicó el cineasta sonriente.

Por su parte, el actor Ron Perlman, quien acompañó a Del Toro en "Cronos" (1993), "Blade II" (2002), "Hellboy" (2004) y "Hellboy 2" (2008), describió al director mexicano como "un Leonardo Da Vinci viviente, cuya genialidad no se puede describir con palabras".

Sobre la japonesa Rinko Kikuchi, quien asistió a la presentación con un elegante vestido rojo y una amplia sonrisa, Del Toro comentó: "Ella nunca se quejó (durante las filmaciones), los otros lloraban y quedaron avergonzados".

"Titanes del Pacífico", que según su realizador tiene el mismo espíritu que "Hellboy", se estrenará el próximo 12 de julio en segunda y tercera dimensión.

Aunque no era el caso anteriormente, ahora "soy un fanático convertido del 3D", confesó el artista mexicano, quien sin embargo opina que ese formato no es para todas las películas.

El cineasta mexicano dirigió en 2006 con éxito El Laberinto del Fauno, un filme ambientado en la guerra civil española, nominada al Oscar en seis categorías y ganadora en mejor maquillaje, dirección artística y fotografía.

Guillermo del Toro nació en 1964 y fue criado por su abuela en Guadalajara, donde estudió maquillaje hasta fundar su propia compañía, Necropia. "Quería ser un pintor de íconos de monstruos", comentó este lunes.

Casado y con dos hijos, el realizador mexicano radicado en Los Angeles (California, EEUU) saltó al estrellato con "Cronos" (1993), que le valió numerosos premios en México y el extranjero./AFP