Por: Sandra M. Ríos, creadora de www.CineVistaBlog.com
Andrés Beltrán es de los pocos directores en el país que ha dedicado su filmografía entera a los géneros del terror y los thrillers. Tras su ópera prima "Malos días" (2016) y "Llanto maldito" (2021), ha llegado el momento de ampliar las fronteras de su cine estrenando esta semana su primer largometraje en inglés titulado “Quicksand”.
La historia es la de una pareja estadounidense, ella de orígenes colombianos, que llega a Bogotá por cuestiones de trabajo. La emoción y expectativa por la conferencia que él dictará guarda de fondo la crisis matrimonial que atraviesan. En realidad, contemplan la posibilidad de un divorcio. Antes de cumplir con los compromisos laborales, deciden hacer una caminata juntos por uno de los bosques aledaños a la ciudad, sin imaginar que una tormenta hará que queden atrapados en el lugar y caigan en un pozo de arena movediza. A partir de ahí, comienza la trama central de este thriller de supervivencia que recuerda aquellas hazañas claustrofóbicas que vimos en películas como “Buried” de Rodrigo Cortés, por allá en 2010.
“Esta es mi primera película en idioma inglés, el 95% es en este idioma, hay muy pocas escenas en español y la rodamos en Colombia. Yo ya había hecho unos cortometrajes en inglés en Inglaterra, pero no un largometraje, con un equipo colombiano y la producción fue mixta”, comenta el director, que ha utilizado talento local para realizarla, entre ellos su protagonista, la reconocida actriz Carolina Gaitán, a quien internacionalmente todos recuerdan por prestar su voz para el personaje de Pepa en "Encanto" de Disney e interpretar el tema "No se habla de Bruno", que fue todo un fenómeno musical con varios récords.
A diferencia de sus dos largometrajes anteriores, la historia de “Quicksand” no es propia de Beltrán, sino que provino del guionista estadounidense para series Matthew (Matt) Pitts. “Esta no es una idea original mía, es de Matt Pitts y es una historia que me cautivó, sobre todo porque crecí un poco con esta idea de las arenas movedizas en los años ochenta y noventa, donde había como un terror hacia las arenas movedizas. Me pareció muy interesante revivir esto y es que, en efecto, las arenas movedizas sí existen, pues hubo un momento en el que la gente creía que no”. El guion del escritor y coproductor de series como “Westworld”, “Revolution” y “Fringe” no estaba pensado inicialmente para rodarse en el país, sino en Centroamérica, con un ambiente mucho más tropical y selvático. La llegada de Andrés a este proyecto se concretó a través de Nicolás Reyes y su casa productora Elemental Stories, quienes estaban en búsqueda de historias que se pudieran realizar en Colombia, pero en idioma inglés. “Nicolás se conoció con el productor de cine estadounidense Jason Cherubini e hicieron este ensamble de coproducción con Sean Burke, otro productor de allá. No sé quién de ellos tenía el guion de Matt, pero se adaptaba perfecto para hacerlo acá, pues era la historia de una pareja estadounidense que llega a un país de habla hispana y a un lugar con ciertas características que podía encajar con el nuestro”.
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Las premisas en el cine de Andrés Beltrán siempre han sido muy sencillas, dejando que los recursos habituales de sus géneros favoritos sean los que complementen sus historias. Entre ellas, siempre ha habido un interés por las situaciones de pareja y familia. “Esta historia también me llamó la atención porque era sobre una pareja que está pasando una crisis y está al borde del divorcio, que es un tema que a mí me interesa mucho, así como las relaciones de pareja y la familia. Con esta base de estos dos personajes, me pareció muy interesante construir esta película a modo de un thriller y darle también mis toques, un poco de terror, sin que sea precisamente de este género”. El director también dio sus aportes para que la historia fuera posible y más creíble en un clima frío como el de la capital, al igual que su experiencia produciendo cine independiente de género a bajo presupuesto, pero con buenos estándares de calidad.
En Cannes 2022, el proyecto participó en el Mercado de Películas, donde fue adquirida por Shudder, una plataforma estadounidense especializada en estos géneros y perteneciente a AMC Networks, donde se estrena en exclusiva a partir de hoy.