Se cumplen dos años de una de las páginas más tristes en la historia del fútbol. El 28 de noviembre de 2016 ocurrió la tragedia de Chapecoense.
El modesto club brasileño había clasificado a la final de la Copa Sudamericana y vaiajaba rumbo a Colombia para enfrentar a Nacional, que de la mano de Reinaldo Rueda pensaba en alzar el título. Esperanzados por romper la estadística y vencer a los paisas, los jugadores cariocas emprendieron un camino que no tendría regreso.
A pocos minutos de aterrizar en la capital de Antioquia, el piloto perdió el control del avión y se estrelló en las montañas de Medellín. Un niño escuchó los gritos de los deportistas adoloridos y llamó a los bomberos, transformándose en el héroe de la catástrofe.
Infortunadamente, tan solo tres integrantes del club sobrevivieron causando un enorme dolor en sus aficionados y familias. Como gesto de Fair Play, Atlético Nacional jugó la final y le cedió el título a Chapecoense. El conjunto brasileño recibió la solidaridad del mundo del fútbol y muchos equipos a nivel mundial optaron por donar dinero a su directiva para generar una nueva nómina.
#HermandadVerdolaga | El fútbol nos puso en competencia pero también nos unió como hermanos ?? Siempre están en nuestros corazones @chapecoenseReal ? #SomosLaPasión pic.twitter.com/onuY0baRcr
— Atlético Nacional (@nacionaloficial) 28 de noviembre de 2018