El crecimiento de la economía de Estados Unidos se aceleró más de lo previsto en el primer trimestre, superando las expectativas de analistas e incluso del gobierno de Donald Trump, según una primera estimación del Departamento de Comercio.

La expansión de la primera economía del planeta se fijó en un 3,2% interanual entre enero y marzo, frente al 1,9% esperado por los analistas en ese periodo, luego del 2,2% en el último trimestre del año pasado.

El presidente estadounidense, Donald Trump, celebró el resultado: “Es un número increíble”, dijo desde la base militar de Andrews cerca de Washington, antes de volar a Indiana. “Tenemos un crecimiento fantástico y una inflación muy baja, y a nuestra economía le está yendo muy bien”, agregó.

El economista jefe de la Casa Blanca, Larry Kudlow, había anticipado a inicios de esta semana que el crecimiento en los primeros tres meses, generalmente más débil que el resto del año, estaría “cerca del 3%”.

Exportaciones

En el trimestre las exportaciones avanzaron 3,7% y las importaciones, que representan un costo para el PIB, cayeron, permitiendo a la balanza comercial contribuir con 1,03 puntos al crecimiento.

Este buen desempeño al inicio del año son buenas noticias para el gobierno de Trump, que asegura que puede hacer progresar de manera duradera la economía de Estados Unidos a un ritmo de 3%, o superior este año, luego del 2,9% de 2018.

Por otro lado podría hacer reflexionar al banco central estadounidense (FED), que tendrá una reunión de política monetaria el miércoles y que ha declarado una pausa provisoria en las alzas de las tasas de interés, anticipando una desaceleración del crecimiento económico y una inflación débil.

Más comercio

Según informaciones periodísticas, el crecimiento se vio impulsado por la actividad comercial y la mayor acumulación de bienes no vendidos desde 2015, en factores temporales que probablemente se revertirán en los próximos meses.

Asimismo influyó un aumento en la inversión del Gobierno, que compensó una fuerte desaceleración de los desembolsos de las empresas y los consumidores.

Los gastos de las administraciones estatales y locales, el comercio, y la inversión en inventarios fueron los principales factores del avance económico en enero, febrero y marzo, preció el informe oficial.

Las cifras

En 2018, la economía estadounidense registró un crecimiento de 2,9%, con incrementos del PIB de 2,5% en el primer trimestre, 4,2% en el segundo, 3,4% en el tercero y 2,2% en el cuarto.

Como uno de los propósitos de su mandato, el presidente norteamericano, Donald Trump, pretende lograr un crecimiento anual de tres a cuatro por ciento de manera sostenida, lo cual sigue como una tarea pendiente.

Estados Unidos lleva 13 años consecutivos con aumentos inferiores al tres por ciento, y en 2016 apenas logró 1,6, el ritmo más bajo desde 2011.

En los mercados, los precios del petróleo cayeron en el mercado europeo, acentuando sus pérdidas después de que el presidente Donald Trump, afirmara que pidió a la OPEP bajar los precios del crudo.

Hacia las 14H40 GMT, el barril de Brent del Mar del Norte para entrega en junio valía 71,92 dólares en Londres, marcando una baja de 2,43 dólares en relación al cierre del jueves.

En Nueva York, el barril de “light sweet crude” (WTI) para la misma fecha de entrega cedía 2,31 dólares, a 62,90 dólares.

Los precios del petróleo se dispararon a principios de la semana, cuando Estados Unidos anunció la anulación de las exenciones que permiten a algunos países importar crudo iraní a pesar de las sanciones de Washington.