El cierre del dólar en el mercado cambiario, presentó una disminución de $26,39, para cerrar la tasa representativa del mercado en $3.861,82.
El precio máximo que alcanzó la divisa en la jornada fue de $3.885, mientras que el mínimo quedó en $3.844,5.
Los expertos coinciden en que, si bien la geopolítica internacional es convulsa e impredecible, no hay acontecimientos a la vista que puedan ocasionar movimientos fuertes en la tasa de cambio para la semana entre el 14 y el 17 de mayo, por lo que el dólar estadounidense continuaría en niveles cercanos a los $3.900.
A pesar de que la tensión geopolítica podría incidir en el precio del petróleo, “la expectativa es que el dólar se mantendrá entre los $3.900″, dice Pablo Garlat.
De acuerdo con los analistas, el dólar ha mostrado un comportamiento estable, en contraste con la volatilidad que se evidenció durante gran parte de 2023. Sin embargo, las dudas persisten en los mercados internacionales, como lo que ocurre en la economía de Estados Unidos.
De otra parte, los mercados han visto con alivio cómo el conflicto en Medio Oriente (entre Palestina e Israel) no se ha generalizado, por lo que ni el precio internacional del petróleo ni las cadenas de suministros (factores que alteran las tasas de cambio en todo el mundo) se han visto afectados.
Por estos días, el empleo es un tema álgido en el país norteamericano y el deterioro en ciertos indicadores podría sugerir una dinámica económica más lenta de lo previsto. El pasado jueves, el Departamento de Trabajo informó que las solicitudes iniciales de subsidios de desempleo aumentaron en 22.000 hasta una cifra desestacionalizada de 231.000.
Un mercado laboral que se debilita incrementa la incertidumbre sobre las tasas de interés en el país norteamericano. “El hecho de que hayan aumentado las solicitudes de seguro de desempleo y que, por ello mismo, se esté viendo un proceso de desaceleración de la economía en el mes de abril, de alguna manera daría argumentos a la Reserva Federal para decidir una baja de tasas antes de lo esperado para reanimar la economía”, explica Henry Amorocho.