Bogotá-Soacha se ubica en la primera posición del Índice de Competitividad de Ciudades 2018, calculado por el Consejo Privado de Competitividad (CPC) y el Centro de Pensamiento en Estrategias Competitivas (Cepec) de la Universidad del Rosario.
La región obtuvo una calificación de 7,41 sobre 10 y se sitúa por delante de las áreas metropolitanas de Medellín, Manizales y Bucaramanga y de la ciudad de Tunja, las cuales ocupan las cinco primeras posiciones de la medición.
Este índice se compone de 89 variables agrupadas en tres factores y diez dimensiones de competitividad y utiliza la clasificación empleada por el DANE en la publicación de estadísticas referentes a ciudades, donde se tienen en cuenta siete áreas metropolitanas y quince ciudades del país.
Con respecto a Bogotá, la medición incluye también el municipio de Soacha.
Liderazgo
El área Bogotá-Soacha es líder en los tres factores del Índice de Competitividad de Ciudades.
De los diez pilares que mide el Índice de Competitividad de Ciudades (ICC), Bogotá-Soacha ocupa el primer puesto en seis: Instituciones, Infraestructura y Equipamiento, Tamaño del Mercado, Eficiencia de los Mercados, Sofisticación y Diversificación e Innovación y Dinámica Empresarial.
Vale la pena mencionar que la región obtiene sus mejores calificaciones en los pilares de Tamaño del Mercado, Sofisticación y Diversificación y Eficiencia de los Mercados con puntajes por encima de ocho sobre diez.
Los desafíos más importantes en materia de competitividad para Bogotá-Soacha se concentran en los pilares de Sostenibilidad Ambiental, Educación Superior y Capacitación en los que obtienen calificaciones de 5,79 y 6,04 y ocupa el quinto y sexto puesto, respectivamente, en la clasificación general.
Bogotá-Soacha también tiene retos significativos en los pilares de Educación Básica, Media y Salud, en los que registra puntajes por debajo de 6,50 y ocupa la octava y tercera posición, respectivamente.
Según Rosario Córdoba, presidenta del Consejo Privado de Competitividad, el Índice de Competitividad de Ciudades “además de servir de complemento al Índice Departamental de Competitividad, provee información confiable y permanente sobre el desempeño de las ciudades en materia de competitividad, así como el aporte que hacen cada una a las regiones que forman parte. Más allá del debate sobre posiciones en el ranking, el ICC es una herramienta de referencia para que las ciudades identifiquen e implementen acciones orientadas al cierre de brechas. Esto les permitirá construir de manera articulada una agenda que genere las condiciones adecuadas para atraer mayor inversión y mejorar los estándares de calidad de vida de la población”.
A su turno, Saúl Pineda, director del Centro de Pensamiento en Estrategias Competitivas de la Universidad del Rosario, señaló que "uno de los aportes más importantes de esta medición de la competitividad urbana, está asociado con la concentración del ejercicio en variables de desempeño. De esta manera, las instituciones locales en las ciudades que hacen parte de la medición, podrán identificar con claridad en cuáles pilares e indicadores específicos cuentan con mayor margen de maniobra para mejorar sus puntajes, sin importar el tamaño de las localidades o de las áreas metropolitanas".
Es importante señalar que, debido a la falta de continuidad o carencia de información para la medición, este Índice aún no incluye nueve capitales de departamentos ya que la ausencia de datos impide medir variables puntuales en todas las ciudades.
Notas bajas
Esta región tiene notas bajas notas en materia de sostenibilidad ambiental en la que se raja con 5,79 puntos. También está con notas bajas sobre seis puntos en Educación Superior y Capacitación con 6,04, Educación básica y Media, y salud con 6,42 puntos, además de infraestructura y equipamiento con una calificación de 6,76 puntos.