Para resolver el caso de represamiento, EPM decidió desviar el agua por la llamada casa de máquinas, lo que implica inundarla y volver a empezar las obras.
Lo que se busca es bajar el nivel del embalse, que originalmente se nivelaba por con el túnel principal, para evitar que haya problemas mayores por un desbordamiento que afecte a las siete comunidades vecinas.
“La empresa hizo el mejor acondicionamiento posible al interior de la casa de máquinas para esta operación”, señaló EPM.
Con esta decisión, los ingenieros tardarían entre nueve y doce meses en la ejecución para rehacer los túneles, obras que estaban previstas para iniciar en en diciembre de 2018.
Sin embargo, estos tiempos no son exactos ya que se desconoce cuánto tiempo puede demorarse el destaponamiento de los túneles originales, que permitirían que la obra siga el cronograma original.