Pese a beneficios del Gobierno, Lafaurie cuestiona acciones del Eln | El Nuevo Siglo
“NUNCA HUBO voluntad de paz por parte del grupo armado”, Lafaurie. /José Félix Lafaurie - Defensoría del pueblo
Miércoles, 22 de Enero de 2025
Redacción Política

LA OFENSIVA emprendida en el Catatumbo entre el Eln y las disidencias de las Farc ha dejado un sinfín de críticas en relación al trato que ha recibido el Ejército de Liberación Nacional durante los diálogos de paz con el Gobierno. Si bien, el presidente Petro condenó las acciones cometidas en esta región, señalándolos como crímenes de guerra, desde la delegación negociadora con este grupo aún se dejó la puerta abierta para dar continuidad con el proceso de paz.

No obstante, para José Félix Lafaurie, quien integró la comitiva en búsqueda de la paz con este grupo, “la suspensión de diálogos es resultado de la incapacidad del Eln de entender que cuando un Gobierno le tiende una mano generosa para poder llegar e identificar las fallas o los elementos estructurales de la violencia y lograr superarlos, la respuesta no puede ser el paro armado, el confinamiento, el asesinato”.

Según dijo el presidente ejecutivo de Fedegán a EL NUEVO SIGLO, “a cada gesto del Gobierno contestaban con asesinatos, como el caso de los tres soldados de una base militar en Arauca en un atentado terrorista. El Gobierno hizo un comunicado diciéndole “esperamos que hayan hechos inequívocos de paz”, y la respuesta fue decretar un paro armado en el Chocó, confinando a la población prácticamente al hambre”.

Lo anterior, según el empresario, representó una ausencia de voluntad de paz, y permitió la dilatación constante de los diálogos, congelados desde febrero del año pasado, y aunque hubo interés en retomarlos en diciembre, la mesa nunca prosperó.

Sobre volver a la mesa, en caso de que esta sea reactivada, Lafaurie comparte con este Diario que para ello: “Creo que pasará un largo tiempo, pues no veo una solución de continuidad”. Además, señaló que “lo que se requiere del Eln son muestras inequívocas de paz. Es decir, tiene que pactar una retórica de lo que ha hecho realmente sus estructuras, afectando la sociedad civil y a tratar de encontrar aquellos elementos que les permitan dejar las armas e incorporarse a la vida civil”.

Finalmente, el empresario también le dijo a este Periódico que en el caso del departamento de Bolívar y los recientes enfrentamientos en este territorio “hay una guerra y una disputa por el control territorial para poder proteger la renta ilícita. Aquí lo que hay es la disputa por la renta en Bolívar por la minería ilegal o narcotráficos, y los corredores de criminalidad que están operando en las diferentes regiones del país”.