CUANDO RESTAN menos de dos semanas para concluir el periodo legislativo, es desesperada la situación del proyecto de ley de financiamiento o reforma tributaria que presentó el Gobierno. Las comisiones económicas ayer suspendieron la sesión porque la mayoría de sus integrantes se ausentaron; hoy nuevamente están citados en un nuevo intento por alcanzar consenso para radicar la ponencia. El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, dijo que los recursos que esperan recaudar por esta vía son necesarios para financiar en al menos $12 billones el Presupuesto General de la Nación.

En caso de que se alcance hoy en las comisiones Tercera y Cuarta de Senado y Cámara consenso sobre el monto de la reforma y los aspectos más polémicos, se radicará y se anunciará la ponencia para votarla mañana, junto con una de archivo a cargo del parlamentario Christian Garcés. De ser así y si es aprobada, la semana entrante las plenarias discutirían y votarían la iniciativa.

Otra situación que se podría dar es que las comisiones económicas aprueben el proyecto, pero se alcance a debatir en las plenarias. Entonces indefectiblemente el Gobierno citará a sesiones extras hasta el 20 de diciembre.

El representante Wilmer Guerrero Avendaño, coordinador ponente del proyecto por la Comisión Tercera, dijo a EL NUEVO SIGLO que no se pudo discutir en las comisiones conjuntas porque “no fue gente, fueron como seis siete personas entonces era muy difícil avanzar. Inclusive la presidenta de la Tercera, pues tenía problemas de salud y no asistió”.

El parlamentario liberal dijo que “si de aquí al martes a más tardar no se ha votado en comisiones conjuntas, se hundió, los tiempos no dan. Y eso tratando de sacarla en sesiones extras, que este año va a haber sesiones extras hasta el 20”.

Por su parte, el senador Antonio Zabaraín Guevara indicó que “no hay consenso en cuanto a la reforma porque no se ha podido consensuar varios puntos. Entonces, no hay nada que hacer porque el Gobierno es sordo. A mi manera de ver eso va a fracasar porque, inclusive, aliados del Gobierno han estado muy convencidos que eso del impuesto al patrimonio no debe ir, que lo del régimen simple tampoco, que los impuestos al carbono tampoco, que el IVA a los vehículos híbridos tampoco”.

Insistió el legislador del Partido Cambio Radical que ve el proyecto “hundido por tiempos y además por votos”.

Mientras que la senadora Aída Avella, coordinadora ponente por la Comisión Cuarta, manifestó su malestar por la ausencia, dijo, de algunos ponentes en sesiones del trámite de la ley de financiamiento. “Empezando por los que están firmando la carta de los conservadores, cómo es posible que Efraín Cepeda no haya ido una sola vez”. Agregó la congresista del Pacto Histórico que “quien no está de acuerdo con un proyecto va y lo discute, es lo mínimo que uno puede hacer”.

Avella subrayó que “si no aprueban la ley de financiamiento, eso es muy grave para el país” porque “no va a haber plata para las regiones”. Al tiempo que advirtió que “se siente que hay una actitud de sabotear la ley de financiamiento”.

Conservadores reiteran posición

El Partido Conservador reafirmó ayer su oposición a la reforma tributaria que presentó el Gobierno para financiar el Presupuesto del 2025. En un comunicado la colectividad indicó que “la bancada de las comisiones económicas de Senado y Cámara del Partido Conservador anuncian su voto negativo al proyecto de ley de financiamiento presentado por el Gobierno nacional, al considerar inconveniente gravar con nuevos impuestos a los colombianos en el actual escenario fiscal del país”.

Agregó que la ley de financiamiento “traería consigo graves efectos para el bolsillo de los colombianos, como el incremento del costo de la canasta familiar, resultado del impuesto al carbono para los combustibles”.

Así mismo, el impuesto por ganancia ocasional en un 20%, también la reforma elimina el régimen simplificado, entre otros.