Tras la elección de Alexander Vega como registrador nacional, ¿cómo queda la distribución de las filiaciones partidistas de los jefes de las principales entidades? Aunque algunos tienen un historial de militancia no es fácil decir a quién representan ahora

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Registraduría

El jueves los presidentes de la Corte Suprema de Justicia, la Corte Constitucional y el Consejo de Estado eligieron como registrador nacional a Alexander Vega, en reemplazo de Juan Carlos Galindo, que termina su periodo en diciembre.

Vega es abogado y ya se había desempeñado como magistrado del Consejo Nacional Electoral (CNE) en representación del Partido Social de Unidad Nacional (La U). Aunque su elección pasó por los tribunales, debido a que tuvo que interponer una tutela para hacer parte de la plancha que lo llevó al cargo, terminó siendo elegido y además ocupó la presidencia de esa corporación. Por esto, según una fuente al interior de La U, su nombramiento genera cierta resistencia al interior de la colectividad: algunos ya no lo consideran como ficha de ese partido y otros niegan que alguna vez haya militado allí.

Siendo magistrado tuvo que afrontar varias decisiones difíciles, como la reglamentación del llamado plebiscito por la paz y la investigación interna que hizo el CNE frente a supuesta la entrada de dineros de la multinacional Odebrecht a las campañas presidenciales de 2014.

Ha sido cuestionado por el candidato a la Gobernación de Antioquia, Andrés Felipe Guerra, por supuestamente pedirle $1.200 millones para llegar al Senado. Vega desmintió las acusaciones.

Fiscalía

El exfiscal Néstor Humberto Martínez fue elegido por la Corte Suprema de Justicia de una terna que envió el entonces presidente Juan Manuel Santos.

Martínez fue uno de los fundadores del partido Cambio Radical. Desde que comenzó en el cargo fue criticado por la oposición por su cercanía al ex vicepresidente Germán Vargas Lleras. Además porque su cargo anterior fue el de ministro de la Presidencia, una especie de superministro que se encargaba de alinear la operación de los demás jefes de cartera y que tenía una estrecha relación con el Congreso.

Tras su salida del cargo, en declaraciones dadas a W Radio tomó distancia del partido al que siempre ha pertenecido. Según dijo, “hubiera querido que me acompañen en este proceso. No los vimos en las objeciones” a la Ley Estatutaria de la JEP “y el partido fue el autor de la extradición, y frente al ‘articulejo’ tuvo una posición que nunca comprendí”.

En reemplazo de Martínez quedó Fabio Espitia, un fiscal de carrera que se encuentra en la cúpula de la entidad desde 1991 quien, además, trabajó con el fallecido fiscal Gustavo de Greiff como fiscal delegado ante la Corte Suprema de Justicia. También fue funcionario en la administración de Alfonso Valdivieso. En este tiempo, también coordinó la Unidad Delegada ante la Corte, donde conoció las investigaciones por el escándalo del llamado Proceso 8.000. Al parecer Espitia no tiene ninguna filiación partidista, pues es funcionario de carrera, sin embargo algunos congresistas de la oposición insisten en que es la ficha del anterior fiscal.

Contraloría

El actual contralor Carlos Felipe Córdoba fue auditor general de la República y terminó elegido por el Congreso con el respaldo del Partido Liberal, La U, Cambio Radical y el Partido Conservador. Con 203 votos se posesionó como la nueva cabeza del organismo de control el 20 de agosto de 2018.

Según se dijo en su momento el expresidente César Gaviria, el ex vicepresidente Germán Vargas Lleras, el exministro Aurelio Iragorri y el expresidente Andrés Pastrana lo respaldaron para llegar al cargo.

Aunque nunca militó en ninguno de los partidos antes mencionados fue ampliamente criticado por la oposición luego de la aprobación del acto legislativo que le entregó más presupuesto y funciones a la Contraloría. El funcionario termina su periodo en 2023, año en el que el Congreso tendrá que elegir nuevamente la cabeza de control fiscal del país.

Auditoría

El Consejo de Estado es el encargado de escoger al próximo Auditor General de la República. Los ternados por la Corte Suprema de Justicia son la excontralora del Valle, Alma Carmenza Erazo; el exsuperintendente de Notariado y Registro, Jairo Alonso Mesa; y Henry Amorocho, consultor de entidades multilaterales como la Organización de Estados Americanos (OEA). Mientras se elige el reemplazo de Carlos Hernán Rodríguez fue nombrado en calidad de encargado Jaime Escobar.

El auditor es el encargado de vigilar la gestión fiscal de la Contraloría General de la República y de las contralorías departamentales. Cabe anotar que en la última reforma a la Contraloría se amplió el periodo del auditor de dos a cuatro años.

Procuraduría

El Senado fue el encargado de escoger a Fernando Carrillo como procurador. El funcionario fue elegido con 92 votos a favor y es reconocido como una de las personas más independientes del país. Resultó elegido con los votos del Partido Liberal, La U, Cambio Radical, los verdes, Opción Ciudadana, el Centro Democrático, algunos conservadores y el Polo Democrático. La terna fue conformada por el Presidente de la República, la Corte Suprema y el Consejo de Estado, este último fue el que nominó a Carrillo.

El funcionario se ha desempeñado como exembajador de Colombia en España (2013-2015), exministro del Interior (2012-2013) y exministro de Justicia (1991-1992) y fue el reemplazo del polémico Alejandro Ordóñez. En los mentideros políticos se dice que es cercano al expresidente César Gaviria, hoy director del Partido Liberal, ya que fungió como su ministro de Justicia y le ayudó en la campaña electoral. Sin embargo, Carrillo se ha mostrado como un funcionario independiente de las filiaciones partidistas.