Piden que sanciones por consumo excesivo de energía sean permanentes | El Nuevo Siglo
EL AHORRO de energía debe ser promovido para mantener la seguridad del servicio. /Archivo
Miércoles, 15 de Mayo de 2024
Redacción Economía

PESE A que el fenómeno de El Niño con su sequía dejó al descubierto que el país puede estar afectado por el riesgo de un apagón, varios expertos recomendaron que se deben continuar con las sanciones por el exceso en el consumo de energía.

Estas multas fueron revocadas por la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG), que había emitido una resolución según la cual se debía aplicar una sanción de 30 % por cada kilovatio de energía adicional consumido en los estratos 1, 2 y 3.

Entre tanto, en los estratos 4, 5 y 6 el peso sería del 50 % por kilovatio de más en la factura. En el caso de un exceso en el consumo en negocios de comercio e industria, la sanción sería el pago del 100 % por kilovatio adicional.

Sin embargo, diez días después de expedida la resolución empezó una leve recuperación de los embalses y el Ministerio de Minas anunció que se daba por terminada la medida que establecía penalidad a mayores consumidores de energía.

José Ignacio López, presidente de ANIF, enfatizó en la necesidad de que las sanciones por exceso de consumo de energía sean permanentes.

La seguridad

En un panel organizado por el centro de pensamiento denominado “Seguridad energética: ¿Cómo ha manejado el país el fenómeno del Niño y qué debe hacer en el corto y mediano plazo?”, tuvo la participación de Alejandro Castañeda, presidente de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras (Andeg); Sergio Cabrales, profesor asociado de la Universidad de los Andes; y José Ignacio López, presidente de ANIF.

En el mismo, López mencionó un protocolo automático que se active cuando el consumo sobrepase el previsto para un hogar. “Las sanciones deberían operar una vez se crucen ciertos niveles. De lo contrario, podría volver a pasar lo mismo que sucedió en este evento climático, que la medida se iba a implementar cuando ya era tarde”.

En línea con ese mensaje central, López dijo que “tenemos un sistema sólido donde la energía térmica respalda a la de generación hídrica en tiempos de sequía, así como un potencial en renovables, pero el país tiene retos muy importantes para mantener la seguridad energética”. En ese sentido, añadió que “preocupa el tema institucional. La CREG no está operando de una manera regular y eso, en una coyuntura compleja, ha sido uno de los talones de Aquiles de nuestra institucionalidad. Pensábamos que teníamos una institucionalidad muy robusta, pero nos hemos dado cuenta de que tenemos algunas fisuras”.

Anotó, además que, a pesar del incremento reciente en los precios por el uso de energías a base de combustibles, en comparación con otros países del mundo, Colombia tiene precios de energía más bajos.

Capacidad

Por su parte, Sergio Cabrales, de la Universidad de los Andes, habló de abastecimiento, sostenibilidad y accesibilidad. Sobre la capacidad instalada, mostró como la hidráulica ha aumentado casi 50 % en los últimos 20 años, mientras la térmica a carbón ha aumentado 66 %, y la térmica a gas se ha duplicado. “Esta es muy importante, porque cuando se presentan esos fenómenos del Niño, por ejemplo, en 2009-2010, 2015-2016 o el reciente, las térmicas son las que nos dan la energía necesaria para suplir la demanda y poder sobrellevar (esos momentos) sin racionamiento. Esta generación va a ser clave en la parte de la seguridad y la confiabilidad”, expuso Cabrales.

También se refirió a la generación solar, donde notó el crecimiento exponencial desde 2008 y cómo entran a operar muchos de los proyectos en 2020. “Esta capacidad, por ahora, representa el 5 % y podríamos llegar al 8 % si sumamos las plantas que están en pruebas, pero todavía es relativamente pequeña”, dijo.

Proyectos

Por su parte, Alejandro Castañeda, presidente de la Andeg, hizo un llamado especial a “destrabar la ejecución de proyectos en el país para poder satisfacer la demanda de energía. Esa no solo es la situación de los proyectos de generación, también les pasa lo mismo a los proyectos de distribución, que se demoran muchos más años de lo planeado, especialmente por un tema de consulta con las comunidades”, dijo. También, argumentó que solo el 30 % de los proyectos asignados en procesos de subastas está entrando en operación comercial.

Además, se debe hacer una nueva subasta de carga por confiabilidad que garantice la energía en firme que nos hace falta. “Si no, vamos a estar sufriendo cada verano, no solo durante los fenómenos del Niño”, mencionó.

Y planteó también que “la importancia de la energía térmica es fundamental, no solamente en estas coyunturas del fenómeno del Niño, sino también hacia adelante, porque es un apalancador de la entrada de renovables. Si yo tengo una generación térmica que me da firmeza, puedo seguir adicionando fuentes intermitentes como las renovables”, concluyó.