En el Concejo de Bogotá se sigue enredando la votación del Plan de Ordenamiento Territorial. Poco después de que un ciudadano radicara una recusación en contra de todos los 45 concejales a votar este articulado, varios concejales también llamaron la atención sobre un hecho clave: no hay claridad sobre qué documento se va a votar, pues no hay aún conciliación de ponencias, no hay un pliego unificado sobre el cual votar.

A este respecto, el concejal ponente, Germán Augusto García (Partido Liberal), aclaró que hay consensos parciales y hay puntos en donde se lograron consensos absolutos, “pero no hay un texto concertado total. Ese texto no existe”.

“Nosotros tenemos la esperanza y el anhelo de que logremos llegar a tener un texto que sea la base de debate para cuando votemos el articulado. Si esa conciliación no llega a tener lugar en las próximas horas o en los próximos días, tendríamos que hacer una conciliación de dos ponencias y votar dos ponencias por aparte, que es algo que no se está dejando de contemplar. Pero en este momento no hay un texto conciliado. Hay un texto parcial”, indicó García.

Por su parte, el otro concejal ponente, Nelson Cubides (Partido Conservador), dejó constancia de que varios de los artículos que él solicitó excluir de una ponencia unificada previa no se han excluido. “En esa medida no existe un pliego plenamente conciliado. Ya existe una conciliación entre los otros dos ponentes. Sin embargo, insisto: si nuestros artículos son excluidos no tengo ningún problema en que esa conciliación pueda avanzar. Eso permitiría que los concejales puedan conocer y trabajar sobre ese articulado”.

Sostuvo que dentro del proceso de conciliación ya están todos claros sobre qué artículos incluir y excluir “y en ese sentido está muy cerca el proceso para conocer el texto final que podríamos colocar a consideración. De no ser así serán independientes”.

Petrismo

De otro lado, fue radicada una recusación en contra de todos los concejales de Bogotá, lo que impediría que comience la votación del articulado del Plan de Ordenamiento Territorial, que debería haber comenzado el martes y ya suma cuatro días de dilación.

Se trata del ciudadano Germán David Cañón, quien precisó que hay un conflicto de intereses por parte de todo el cabildo para darle trámite a este documento. “Respetuosamente solicitó a esta honorable corporación que previo al trámite legal correspondiente, si fuere necesario, se declaren impedidos todos los concejales para conocer de la aprobación del presente proyecto denominado Plan de Ordenamiento Territorial”, indica la recusación que se radicó con el logo de Colombia Humana.

Además lea: Viva noches de mística e historia por el Cementerio Central

Ante este hecho, la alcaldesa Claudia López le echó la culpa al petrismo. "Ahí están pintados los petristas: primero vociferan que se debata abiertamente el POT. Y luego presentan dos recusaciones infundadas para que no se pueda debatir. Resultaron los mejores aliados del peñalosismo que pide a gritos no tramitar este POT para que se mantenga su modelo", trinó la alcaldesa López. 

Ante este hecho, la concejal de la coalición de Colombia Humana-UP-MAIS, Susana Muhamad, aclaró que este ciudadano no hace parte de su movimiento, no está inscrito como miembro y si bien es posible que sea simpatizante del movimiento, la concejal indicó que lo que hizo fue bajar el logo de Colombia Humana y lo usó en una comunicación de forma indebida.

“No pueden enlodar el nombre de esta bancada. Esta es la acción de un ciudadano que no tiene nada que ver con nuestro movimiento y que no está representando con lo que esta bancada se comprometió, política y éticamente, en el Concejo de Bogotá. Pido respeto por parte de otros concejales y de la Administración para que no vengan a decir que es Colombia Humana la que está retrasando el trámite de este POT o haciendo jugaditas ilegítimas sobre la mesa. Ese no es nuestro comportamiento”, expresó la concejal, quien dijo que muchos de los militantes están recogiendo firmas para pedirle al concejo que no vote el POT, “pero haciendo uso de herramientas democráticas”.

Por su parte, el concejal del Polo Carlos Carrillo, a quien el abogado Alarcón que hace parte del equipo de trabajo del concejal Julián Rodríguez Sastoque acusó por redes sociales de estar detrás de esta recusación, fue pronto a aclararlo: “Prueben que estoy detrás de esta recusación. No tengo nada que ver con ella. Demos las discusiones de frente y sin mandaderos. Yo doy discusiones de frente y cara a cara”, indicó el concejal.