Columnistas | El Nuevo Siglo
“En estos días, imposible evadir sensación de cierre”
Cambio de año
 
Los finales
En  estos días es imposible evadir la sensación de cierre. Termina el año y con él tenemos la percepción de terminar nosotros también. Terminan años académicos, ciclos laborales, procesos económicos, proyectos políticos.
“Restitución en condiciones de equidad a las víctimas”
El mono de la pila
 
Siervo sin tierra
 
Gran sentido de la Navidad
 
¿QUÉ  celebramos? ¿Por qué todo ese despliegue de luces de música y de distintos festejos? ¿Por qué estamos en el año 2014? Son preguntas que en algún momento nos hemos hecho al llegar la Navidad.
Pobres urbanos y pobres rurales
 
El desarrollo de las ciudades más importantes del país ha permitido que los más pobres que habitan en ellas, tengan en general acceso a los bienes y servicios básicos de una vida digna y decente. Ciudades como Bogotá o Medellín han puesto al alcance de los pobres la educación, los servicios de salud, el transporte, la recreación, los subsidios, etc.
No a impunidad que buscan las Farc
 
A  diferencia de tantas voces “ilustradas” que insisten en que eso del Estatuto de Roma es un embeleco de los amigos de la guerra para obstaculizar la paz , las Farc sí se lo toman muy en serio.
Los que cierran los ojos ante tamaña evidencia proclaman,  inclusive , que si se firma algo con dicha organización la Corte Penal Internacional no asumiría su competencia subsidiaria en Colombia.
EL RITO DE LA BEBIDA
Diciembre y alcoholismo
EL  alcoholismo cumple una función en la organización social colombiana. Su uso es ritual en la vida de relación social de nuestro medio. No hay celebración política o privada que no esté necesariamente precedida, acompañada o seguida del consumo del alcohol.
 ASIMETRÍAS
Pan y circo 2014
Se afirma que los romanos decían que al pueblo hay que darle Pan y Circo, reflejando la necesidad que tienen las sociedades de trabajo y calidad de vida, pero en Colombia hay momentos en que la política se ocupa mucho más en dar Circo que Pan, y no mejores momentos a los colombianos, sino espantosos espectáculos, y eso nos dejó la política en 2014.