Tras varios días de incertidumbre y en medio de una corta, pero muy competida campaña electoral, por fin se despejó el panorama para los comicios en que se escogerá gobernador del Putumayo y alcalde de Puerto Guzmán, en el mismo departamento.

La realización de estas elecciones atípicas estaba en vilo, debido a que el Gobierno nacional no había destinado el presupuesto requerido para financiar todo el operativo logístico necesario para esa cita en las urnas en la que deben seleccionarse el nuevo timonel departamental y el burgomaestre del citado municipio, ya que a los elegidos en octubre de 2023 les anularon las respectivas credenciales porque incurrieron en la causal de doble militancia.

La dirigencia regional del Putumayo había prendido las alertas en torno al riesgo de un vacío de poder en la gobernación y la referida alcaldía por cuenta de no tener certeza de cuándo se podrían llevar a cabo las jornadas democráticas.

Afortunadamente el pasado lunes, en una reunión de garantías electorales en Mocoa, a la que asistieron el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, y el registrador nacional Hernán Penagos, se viabilizó una solución. Por un lado, se aseguró el presupuesto necesario y, de otro, los comicios ya no se realizarán el 9 de febrero, sino el día 23, esto con el fin de dar suficiente tiempo a la organización electoral para implementar todo el operativo logístico, incluyendo instalación de puestos de votación, sistemas de escrutinio y de transmisión de datos, así como otros elementos básicos para garantizar una cita en las urnas eficiente y transparente.

Penagos pidió a la Fuerza Pública y demás conjunto institucional coordinar para que la votación se lleve a cabo en medio de condiciones efectivas de seguridad y sin ningún tipo de presión o interferencia de actores ilegales.