Un teléfono. Un viejo y buen teléfono fijo. En caso de fallo en las comunicaciones entre el centro de operaciones del VAR instalado en Moscú y uno de los estadios del Mundial, será mediante una simple llamada telefónica que un asistente de video advertirá al cuarto árbitro el error a corregir.
Para el Mundial de Rusia-2018 la FIFA eligió el modelo alemán, es decir un único centro de operaciones, el VOR (Video Operation Room), instalado en Moscú. Y no el modelo utilizado en la Liga italiana, que prevé una sala de video en cada uno de los doce estadios mundialistas.
Este centro de operaciones, que estará en el IBC (Centro internacional de televisión), estará conectado a todos los estadios a través de una red de fibra óptica.
¿Y si falla la conexión de fibra optica?
"Tenemos soluciones de emergencia a través de los intercomunicadores prestados por las emisoras. Y si éstas también fallan, tenemos una línea de teléfono fijo. No de teléfonos móviles, porque con ochenta mil personas en el estadio, hay tantas frecuencias, tantas señales...", explica Sebastian Runge, director del Grupo de Innovación Tecnológica de la FIFA.
"Esta (linea fija) servirá para el VAR, ya que se podrá llamar al estadio y decir 'ok, hay algo que no está bien'", agrega.
Por ello, incluso en un situación tan crítica como esa, el VAR continuará funcionando gracias a la ayuda de ese teléfono fijo a la antigua, instalado a un lado del cuarto árbitro, al borde del campo de juego.
"Si, en ese caso continuaremos usando el VAR. En caso de error manifiesto, el VAR hace una llamada telefónica al cuarto árbitro, que contesta y puede pasarle el teléfono al árbitro central. Este sistema funcionará. No debería hacer motivo alguno para dejar de usar el VAR", asegura Runge.