"No sabemos cuánto vale la reforma pensional": Bruce Mac Master | El Nuevo Siglo
EL presidente de la ANDI y el CGN, Bruce Mac Master, dice que falta saber el impacto fiscal que causaría la reforma pensional. / Cortesía ANDI
Viernes, 26 de Abril de 2024
Redacción Economía

El presidente de la ANDI y del Consejo Gremial Nacional, Bruce Mac Master, se mostró en contra de la forma como el Gobierno ha venido adelantando el proyecto de reforma pensional, sobre todo con los cambios sobre el pilar contributivo para dejarlo en cuatro salarios mínimos por deseo del presidente Gustavo Petro, y no respetando los acuerdos que se lograron en el Senado con el umbral de 2,3 salarios.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cuál es su percepción sobre el proyecto de reforma pensional que adelanta el Gobierno?

BRUCE MAC MASTER: Parecería que no estamos siendo conscientes de cuáles son las obligaciones que tiene el Estado cuando se sube el umbral para las pensiones. No hay un estudio de aval fiscal de esta nueva versión, no hay un cálculo fiscal y ese es un motivo grande de preocupación. Lo otro que sorprende es que se logra un acuerdo en el Senado con un umbral de 2,3 salarios y al día siguiente lo modifica el presidente Petro, cuando dice que ya no es ese el umbral, sino que prefiere que sea de cuatro salarios. Parecería que se les hizo una oferta a unos senadores para que cambiaran de opinión y luego simplemente en la Cámara se piensa otra cosa, con lo cual no se sabe cuáles son las intenciones y queda la sensación de que no es un proceso claro.

Lo bueno y lo malo

ENS: ¿Qué cosas destacaría del proyecto y cuáles no?

BMM: Hay cosas en la reforma que son interesantes, como la cobertura de un subsidio para los adultos mayores que no cotizaron, pues está muy bien, y la reducción del subsidio de las pensiones a las de mayor valor, en eso estaríamos de acuerdo, pero debemos tener justamente esos cálculos financieros y fiscales para poder saber de dónde sale todo. En realidad, no sabemos cuánto vale la reforma pensional. Hay cosas que claramente no nos gustan; por ejemplo, el hecho de que se les quite a los colombianos la posibilidad de elegir dónde cotizar y se les obligue y se produzca una estatización realmente grande de todo el sistema. Eso va en contravía de lo que Colombia había pensado y había diseñado durante tantos años y no era algo que saliera de la nada, sino que era la respuesta a un sistema que estaba con grandes problemas fiscales en los años 90 y que fue solucionado de esta forma. Entonces ahí hay una duda grande también. En realidad, el Gobierno debería entregar toda la información de cómo funcionaría el sistema y cómo sería financiado, para que el país realmente pudiera tomar una decisión alrededor de un tema tan sensible como este.

Las propuestas

ENS: Algunos sectores se han quejado de que con las reformas se hacen las reuniones con el ministro de turno, se le explican las necesidades desde el punto de vista técnico, pero esas propuestas finalmente no se incluyen en los proyectos...BMM: Sí, hemos tenido muchísimas reuniones a lo largo de estos dos años, en donde aparentemente llegamos a acuerdos y después nos cambian todo.  El primer ejemplo de eso fue la conversación alrededor de la primera reforma laboral, que habíamos trabajado durante ocho semanas con tres reuniones semanales, con reuniones desde las nueve de la mañana a la una de la tarde, con la ministra y con el equipo del Ministerio del Trabajo. Habíamos acordado 51 artículos y solo quedaban 17 pendientes para ser acordados en el Congreso. Incluso, acompañé la radicación simbólica de esa reforma que hubo en la Plaza de Armas, y luego cuando publicaron el texto radicado, no se había incluido nada de lo que habíamos negociado durante dos meses. Y con la reforma a la salud pasó muchas veces lo mismo, primero con la exministra Carolina Corcho y luego con la administración de Guillermo Alfonso Jaramillo. Uno va a reuniones, a audiencias, damos una discusión, aparentemente llegamos a acuerdos sobre algunas cosas y finalmente hacen algo completamente distinto. Entonces yo sí diría que el Gobierno tiene que hacer un esfuerzo importante por ser muy leal en la construcción de consensos.

 

 

ENS: ¿Cree que está primando el aspecto ideológico sobre el técnico en las discusiones con el Gobierno?

BMM: Sí, sentimos que hay una gran cantidad de propuestas y proyectos que quieren que sean populares entre la gente, pero sin ningún tipo de sustento técnico y eso al final por supuesto pone a la gente en una situación muy compleja, porque nos lleva a tomar decisiones que no van a ser sostenibles en el largo plazo. Yo siempre lo he dicho: cuando uno produce una decisión populista pero insostenible en el largo plazo, está engañando a la ciudadanía, y tenemos que asegurarnos de que eso no suceda.

La economía

ENS: ¿Qué balance hace del comportamiento de la economía?

BMM: Tenemos un gran problema de crecimiento en Colombia, estamos viviendo una época de recesión permanente que no nos permite en este momento crecer en los próximos meses, crecer en términos de empleo, crecer el valor de nuestra producción, y por el contrario estamos teniendo señales de que el futuro cercano va a ser exactamente igual. Es que tuvimos la noticia del retiro de General Motors de Colombia después de casi 70 años, esa es una pésima noticia para la economía colombiana, por ejemplo. Y en el sector de la construcción hay muchas empresas también golpeadas que casi que las están sacando del mercado.

Y en este momento los sectores que están poniendo la cara por el resto de la economía son, por un lado, la agricultura, que está muy bien, que tiene una oportunidad grande; pero por otro lado, la minería y el petróleo siguen jalonando y no deja de ser un contrasentido, porque son justamente los sectores que el Gobierno ha intentado desincentivar. No sé qué hubiera sido de Colombia sin la minería y sin el petróleo durante estos meses.

ENS: ¿Qué opina sobre la disminución de las tasas de interés?

BMM: Eso es absolutamente imperativo que se produzca en este momento. La inflación está en un nivel cercano al 7 % y las tasas de interés de colocación, que no son las del Banco de la República, sino de colocación de los bancos o del sistema financiero en los ciudadanos y en las empresas, están alrededor del 17 %, es decir, la tasa de interés real que paga hoy en día un hogar colombiano o que paga hoy en día una empresa colombiana es de cerca del 10 % real. No hay economía que aguante eso ni tampoco hay economía corporativa o societaria que lo aguante.

 

La caída de la inversión

ENS: ¿Cree que la inversión se va a alejar más del país?

BMM: Es que la inversión va en bajada y ya tuvimos una caída del 9,8 % el año pasado en la formación bruta de capital. Ese es un síntoma de que la inversión está muy afectada, y un país que no invierte es un país que no está construyendo futuro. Una economía como la nuestra, que tiene un rezago tan grande, no puede sentirse satisfecha de no crecer. Nosotros tendríamos que estar creciendo realmente a tasas del 3 %, del 4 % o hasta del 8 % si queremos realmente recuperar el rezago, si queremos mantenernos más o menos en las mismas posiciones en que hemos estado por los últimos años. Pero con un 0,2 % es muy malo ahora, y eso se cambia con inversiones. Por eso Colombia no se puede dar el lujo de estar ahuyentando y asustando a los inversionistas. Eso es lo que les produce un daño inmenso a las próximas generaciones. Si nosotros no somos capaces de crear condiciones para nuevas inversiones, no estamos en nada.