Con la instauración del toque de queda en nuevas regiones de Francia e Italia, el reconfinamiento general en Gales y el aumento de las restricciones en otras zonas del Reino Unido y España, Europa se encierra un poco más para intentar frenar la segunda ola de la pandemia de covid-19.
En este momento y según el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC), la evolución de la pandemia suscita una "grave preocupación" en 23 países de los 27 que componen la Unión Europea (UE), así como en Reino Unido.
Solo se salvan Finlandia, Chipre, Estonia y Grecia. Hace un mes, solo siete países europeos estaban en esta lista roja.
Ayer el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, estimó que en el país ha habido al menos tres millones de personas contagiadas aunque oficialmente se hayan registrado un millón.
El jefe de gobierno explicó que la enorme diferencia radica en que al principio de la pandemia la detección de casos era deficiente y ahora se diagnostica el 70% de los casos.
"La situación es grave" y vienen meses "muy duros" con la llegada del frío, agregó Sánchez, en un mensaje destinado a preparar a la población para medidas sanitarias más duras que deben acordar las regiones autónomas, que en España toman las decisiones en materia de salud, con el gobierno central.
Poco antes, las autoridades de varias de las 17 regiones autónomas del país anunciaron nuevas restricciones y algunas pidieron al ejecutivo central que imponga un toque de queda. España es uno de los países más golpeados por la pandemia con más de 34.500 fallecidos.
¿Navidades digitales?
En el Reino Unido, país más castigado de Europa con más de 44.000 muertos confirmados, entró en vigor en Gales un segundo confinamiento general ayer.
La región se convertirá así en la primera del país en adoptar esta medida drástica y sus más de tres millones de habitantes tendrán que "quedarse en casa" hasta el 9 de noviembre.
En Inglaterra, el gobierno de Boris Johnson trata de evitar un nuevo confinamiento general, pero más de la mitad de sus 56 millones de habitantes viven en zonas con estado de alerta elevado y en medio de importantes restricciones.
El jueves, uno de los responsables de salud de Escocia advirtió a los ciudadanos que deberían prepararse para una "Navidad digital". Jason Leitch consideró que es "demasiado pronto para decir" cuántos hogares podrían reunirse para las fiestas, pero que de ninguna manera sería una "Navidad normal".
El jueves, Irlanda se convirtió en el primer país europeo en reconfinar por completo a su población, por un plazo de seis semanas, durante las cuales los comercios no esenciales permanecerán cerrados, no así las escuelas.
El perfume del confinamiento de la primavera flota también en Portugal, donde tres municipios del norte del país, unos 150.000 habitantes, se reconfinaron ayer.
40.000 nuevos casos diarios en Francia
En Francia, las cifras siguen aumentando y en las últimas 24 horas se diagnosticaron más de 41.600 casos, 15.000 más que la víspera, una cifra récord. El gobierno amplió el jueves el toque de queda nocturno que ya se aplicaba en París y las principales ciudades del país a otras regiones.
Desde ayer esta medida afecta a un total de 46 millones de personas, dos tercios de la población, por seis semanas.
"Las semanas próximas serán duras y nuestros servicios hospitalarios van a verse sometidos a una dura prueba", advirtió el primer ministro Jean Castex.
Francia se acerca ya al millón de personas infectadas y la tasa de positivos ya llega al 14,3%, frente al 4,5% de principios de septiembre.
En Italia, la región del Lazio, donde se sitúa Roma, instauró un toque de queda ayer entre las 23 y las 05 horas por 30 días. La región se suma a Campania y a Lombardía que aplicaron medidas similares.