Columnistas | El Nuevo Siglo

Medios desmedidos

 

Es  irónica la crítica de moda hacia Bogotá y, de paso, a los “círculos sociales de la sociedad capitalina”. Desde el ensañado discurso uribista a los cócteles bogotanos, hasta la injusta crítica a la Universidad de los Andes, publicada por Cecilia López en el periódico Portafolio.

El poder de la convocatoria digital

 

El poder, la profundidad y el dramatismo del cambio tecnológico, lo acaba de vivir nuestro país con las sucesivas y sincronizadas marchas universitarias contra la reforma educativa. El uso extensivo e intensivo de las redes sociales digitales le permitieron adueñarse de las calles a miles de jóvenes ante la impotencia de unas autoridades educativas que nunca parecieron tener cabal sentido y dimensión de lo que estaba sucediendo.

¡Cómo me duele!

 

Cómo me duele no poder decirle a mi hija que tengamos un secreto, porque si le enseño que puede tener secretos con los adultos, algo malo le puede pasar.

Cómo me duele saber que no puedo dejar que mis hijos salgan a jugar a la calle como yo lo hice; a tocar todos los timbres de las puertas, jugar tarro, escondidas y perderse en las casas de sus amigos.

¿Podemos seguir pensando en la paz?

 

"Cano hubiera podido hacer la paz conmigo”: Juan Manuel Santos, presidente de la República.

…Si Timochenko fuera…

 

Si Timochenko fuera más inteligente que anacrónico, y en verdad le importara el pueblo que con una mano dice defender y con la otra ordena exterminar, le diría a sus ya dispersos y menguados ejércitos, que no hay caso. Que no tiene sentido continuar dándole respiración artificial a un empeño que ya demostró ser estéril e imposible, que perdió el rumbo y se contaminó hasta la médula.

Hombres a las filas

 

El  Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) lleva más tiempo de lo debido en el ojo del huracán y es mucho lo que se espera del cambio en su directiva.

Puntos del vice Garzón

 

Alguien tenía que ponerle el cascabel al gato en este país, en el que todos abusan de todos, donde sin misericordia se explota a la gente, y en donde se alimenta el alzheimer de 43 millones de habitantes, para acallar y sepultar la protesta, el descontento, la indignación y la inconformidad. Somos los terceros del mundo en desigualdad.

Es sólo un partido