Columnistas | El Nuevo Siglo

La Constitución ha muerto

 

A pesar del poderoso y bello espíritu que ha acompañado a nuestra Constitución Política desde sus inicios, el descabellado procedimiento de su proclamación, la ilegal forma de su aprobación y la ausencia total y absoluta de técnica jurídica hicieron de ella un texto inocuo e inoperante en sí mismo, es decir, un texto inconstitucional, aun cuando suene paradójico.

Los protocolos inhumanos

 

Según la Constitución y la actual jurisprudencia, el de la salud es un derecho fundamental. Se garantiza a todas las personas el acceso a su promoción, protección y recuperación (Art. 49).

Por otra parte, es obligación de toda persona “obrar conforme al principio de solidaridad social, respondiendo con acciones humanitarias ante situaciones que pongan en peligro la vida o la salud de las personas” (Art. 95).

La percepción de seguridad

 

Con  los últimos acontecimientos está decayendo la percepción de seguridad en Bogotá y es lógico que esto suceda, pues si escuchamos los relatos de hechos tan macabros como el sucedido en los predios del Parque Nacional y algunas actuaciones infortunadas de policías (mas no de la institución) entenderemos cierta prevención en los ciudadanos no sólo de la capital sino del país en general, por su seguridad personal y familiar.

Cuatro días de fiesta

 

Nada mejor para olvidar la crisis económica y las nubes negras en el horizonte europeo, que hacer una fiesta, “un parrandonón”, como diríamos en Colombia, de cuatro días.

Esto fue exactamente lo que los británicos hicieron, ¡Ofcoursemydear!, para celebrar los sesenta años de reinado de su soberana Isabel II, quien ha sido actora y testigo de una era de cambio sin igual en Gran Bretaña.

¿Cuál democracia?

 

Uno de los muchos artículos que saturan la Constitución establece la obligación de la enseñanza de la Constitución y el fomento de la democracia participativa, precepto que se cumple a medias y con notable deficiencia, pues por principio se educa con el ejemplo y en Colombia, precisamente, lo que cunde es el mal ejemplo.

Haciendo la tarea

 

Nicolás Sarkozy no alcanzó a capitalizar la liberación del periodista Langlois porque las Farc entendieron bien el tablero político francés.

Entendieron que al tener comprometido al Presidente en el secuestro, poco importaba si liberaban al reportero sólo para darle un último aliento a su pálida campaña.

Prioridades

 

Indicó junio con prioridades para el Gobierno nacional. Reducir la pobreza y el desempleo, apurar obras públicas y tramitar la reforma tributaria.

La economía todavía respira un buen ambiente, influida por suficiente demanda de los hogares, consumo de bienes y servicios, crecimiento de pagos con tarjetas de crédito, inversiones para el TLC con EE.UU. y aumento en ventas y facturación en industria y comercio.