Ante la avalancha del divorcio
Se ha destacado en estos días el hecho del enorme crecimiento del número de divorcios en el país, verdadera avalancha. Personalmente me duele este hecho, porque es signo de erosión social y de estarse socavando la familia, primera columna de sólidas prósperas sociedades. Pero no me extraña que esto suceda ante el ilusorio relativismo como quieren tantos que se viva, según lo que sea más atractivo y cómodo, sin esfuerzos ni sacrificios sino disolutamente.