¿Pastores fallidos?
Reunir. Éste es el concepto clave de la actual liturgia. “Yo mismo reuniré el resto de mis ovejas”, dice Yahvéh (primera lectura Jer 23, 1-6). Jesús ve la multitud con compasión y exclama: “son como ovejas que no tienen pastor” (Evangelio c 6, 30-34), pero Él, buen pastor, las reunirá en un solo rebaño (Jn 10,16).